Fran Chuan, experto en liderazgo y cultura de la innovación empresarial y fundador y CEO de InnoQuotient, la herramienta de diagnóstico de cultura de la innovación avalada por el MIT, ha participado este jueves, 29 de septiembre, en el IV Encuentro Alumni de ESIC Sevilla, con una ponencia centrada en los “Mitos y leyendas sobre la innovación”.
En ella, Fran Chuan ha llamado la atención sobre que “cuando hablamos de innovación lo normal es que cada uno de los miembros del equipo directivo tenga una definición sustancialmente diferente de los demás sobre qué es la innovación” y ha destacado la necesidad de contar una definición común dentro de los distintos equipos y departamentos de una organización. Según él, “la innovación es un cómo, es decir una solución diferente y mejor, a un qué, un problema o necesidad, existente”.
“La innovación no es cara ni crea problemas o necesidades, sino que da soluciones diferentes a un problema o necesidad que afecta a mucha gente y lo hace simple”, ha subrayado y ha asegurado que «la innovación puede venir de ejemplos obvios y cercanos”. En este sentido, ha puesto como ejemplos la taza (un vaso con asa), la maleta con ruedas y la fregona y ha recalcado que “detectar oportunidades es un problema de actitud”. “La incertidumbre que vivimos en estos momentos es una situación que va a perdurar y del futuro no tenemos datos. Por ello, debemos pensar en grande y dar pequeños pasos para generar datos que nos permitan llegar a sitios diferentes”, ha insistido.
Requisitos para innovar
En cuanto a los requisitos indispensables para poder innovar, el CEO de InnoQuotient los agrupa en la fórmula “CICE + TE”. Así, según Fran Chuan, la curiosidad, la imaginación, la creatividad y la experimentación son fundamentales para la innovación, y a ellos es necesario añadir tiempo y un espacio adecuado. “Las organizaciones deben no desmotivar a sus empleados, sino aprovechar su energía, facilitarles los espacios y permitirles la experimentación”, ha señalado el experto en innovación empresarial, quien ha recalcado que “toda organización debería tener el rincón de pensar” porque “cuando nos convertimos en niños somos mucho más innovadores que cuando nos comportamos como adultos”.
Asimismo, Fran Chuan ha asegurado que el punto de partida en la innovación se basa en lo que llama “método DACS”: Desmitificar qué es la innovación, que no tiene que estar ligada a la tecnología; Alinear los conceptos en busca de una definición común dentro de la misma organización; Concretar, es decir, establecer el punto de partida a partir de un autodiagnóstico que permita a cada organización conocer su cultura; y Sistematizar. Esto último, tal y como ha detallado, consiste en “aplicar de manera rigurosa y disciplinada el gran mantra piensa en grande, actúa en pequeño y comunica en lluvia fina y solo los hechos, si no la cultura te comerá y no permitirá los cambios”.
En este sentido se ha referido a InnoQuotient y ha explicado que este modelo, avalado por el Massachusetts Institute of Technology (MIT) y publicado en el MIT Sloan, permite medir la cultura de la innovación en las organizaciones basándose en las personas que las integran e identificar los frenos y las oportunidades de innovación que tienen. No en vano, tal y como ha defendido Fran Chuan, “las empresas no innovan. Las que innovan son las personas”.
IV Encuentro Alumni de ESIC Sevilla
El IV Encuentro Alumni de ESIC Sevilla ha sido inaugurado por la directora del centro de negocios, Patricia Cuevas, quien ha agradecido la asistencia de antiguos alumnos de tantas ediciones diferentes, así como la participación de los ponentes y ha trasladado un mensaje de confianza en cada persona y en la escuela, en este contexto de incertidumbre.
Fran Chuan ha sido uno de los invitados a dar una microconferencia en esta edición, en la que también ha participado Pablo González, CEO de Trivu.
La entrada de 10 euros por asistir a este encuentro se ha donado íntegramente al Banco de Alimentos de Sevilla que, en total, ha recibido un cheque de 1.150 euros.