Carlos es un emprendedor totalmente comprometido con el medio ambiente y la salud de las personas que se ha puesto como objetivo concienciar y compartir los problemas de la humanidad, actuando como una palanca en el cambio social.
Este activista convencido nos comenta que la pandemia ha despertado la empatía con el mundo en general y nos ha llevado a una posición de corresponsabilidad con el medioambiente que hemos de aprovechar. Cree que ha llegado el momento que las grandes empresas dejen de pensar solo en facturación y beneficios, y empiecen a pensar más en el impacto que generan. “Consumimos un millón de botellas de plástico al minuto, de los cuales no se van a reciclar más del 9%”.
Carlos cree que aunque el miedo separa y crea desconfianza, es posible encontrar puntos de encuentro y de trabajo conjunto. “La única diferencia entre el miedo y la esperanza, entre la herida y la cicatriz, es la historia que nos contamos a nosotros mismos”.